En Askora creemos que las mejores historias son las que se salen de la norma, las que encuentran belleza y valor donde otras miradas no se detienen. Por eso presentamos con orgullo nuestra nueva colaboración con Casa Eceiza, referente de la repostería de calidad en Euskal Herria, para dar una segunda vida a alimentos que, aunque no cumplen los estándares estéticos habituales, conservan intacto todo su sabor, su calidad y su esencia.
Tejas que se rompen, cigarrillos mal enroscados, recubrimientos irregulares… Aunque son la excepción, forman parte natural del proceso de elaboración de estas joyas gastronómicas. Productos “casi perfectos” elaborados en Tolosa que se incorporarán a nuestros menús, convirtiéndose en parte de momentos cotidianos de disfrute y convivencia. De esta manera, evitamos su desperdicio y ofrecemos a nuestras comunidades sabores auténticos que merecen ser compartidos.
En Askora defendemos que la sostenibilidad y el compromiso social también se construyen desde la cocina, desde decisiones pequeñas y conscientes que ponen en valor el alimento más allá de su apariencia.
Esta alianza con Casa Eceiza es un ejemplo claro: nos permite reducir el desperdicio alimentario, apoyar a un productor local de gran trayectoria y reforzar una idea clave entre quienes comen con Askora: la calidad no se mide solo por el aspecto. Por eso, nos hace tanta ilusión convertir productos “feos”, en una preciosa colaboración.
Junto a Casa Eceiza seguiremos trabajando para que la alimentación sea una herramienta de transformación social: más consciente, más responsable y más justa con quienes la hacen posible.



